coincido plenamente en todo lo que aqui expresa y que habla de la
importancia de decidir tener o no tener hijos.
Inteligente, bella y justa.
y mis amigos padres no se enojen con ella sino leanla bien.
Vos porque no tenés hijos
Osvaldo Bazán
Padres: la responsabilidad es de ustedes. Son ustedes quienes no saben
decir no. Tampoco saben decir sí. Y no tienen idea de por qué decir sí
o por qué decir no.
Sin embargo, están tan enceguecidos con el mandato milenario de la
santidad de la maternidad y la paternidad que nunca se van a hacer
cargo. De acuerdo, a muchos de ustedes casi lo único que les pasó en
la vida es ser madre o padre. (Al menos es lo que se puede colegir de
las conversaciones de cumpleaños de gente de mi edad: aviso, no me
inviten a cumpleaños de gente de mi edad, no pienso soportar una
conversación más sobre cuotas de colegio, color y consistencia de la
caquita mañanera o precios y marcas de óleo calcáreo.) Pero ¿vieron a
sus hijos?; ¿los vieron como los vemos todos los que no somos padres
de sus hijos?; ¿no les dan un poco de vergüenza? De acuerdo, no lo
confiesen pero ¿no les dan un poco de vergüenza a veces? Bueno,
debería.
Todos esos chicos que se revientan a navajazos, todas esas nenas que
tienen como único norte cantar las canciones de Patito feo y mostrar
lascivamente tetitas que no tienen, todos esos nenes discriminadores,
groseros, brutos, sobreinformados de la nada, maleducados: son su
obra. No es la televisión, no son las maestras, no es Cristina. Son
ustedes.
Padres y madres argentinos que no saben serlo, que se quedan cortos de
autoridad y largos de desconcierto. Son ustedes.
Los padres. Que no son los reyes. Los reyes son los nenes y hacen lo
que se les canta y nosotros, que no tenemos hijos por decisión propia,
no queremos ser sus súbditos.
Hay una edad –que pasé hace un tiempo– en que uno no es padre. Así,
sencillamente. Uno viene siendo un joven, pasa a ser un adulto y ahí
ya tiene que explicar que no, que no tiene hijos. Que no es padre.
Quienes no tienen padres son huérfanos. Quienes no tienen hijos no
tienen nombre. No tenemos nombre. No hay nombre para designar a
aquellas personas que, llegadas a la edad en que la que podrían serlo,
no son padres. ¿Por qué? Parece que a algunas mayorías les resulta
difícil aceptar que algunos no queremos ser padres o madres. Que
pensamos que es un trabajo para el que no estamos capacitados, que el
mundo continuará andando porque la cosecha de hombres y mujeres nunca
se acaba, pero que nosotros, mejor, contribuimos de otra manera. Sin
embargo, está lleno de padres por default. Son mayoría. No los que se
cuestionaron para qué traer –más allá del egoísmo de sentirse alguien–
una persona a este mundo que todo el tiempo está avisándote que no
necesita a nadie más, sino quienes ni se plantean que están fabricando
más gente de la que el planeta quiere soportar. La naturaleza, que
tanto pregonan, no sabe cómo hacer para decirles que basta, que hay
que parar de tener hijos por dos años.
Están convencidos de que son moralmente mejores por haber traído esos
delincuentes juveniles a este mundo.
Sean las retenciones, la legalización de la marihuana, la violencia en
el fútbol o las peleítas mediáticas del momento, nunca falta el
superhombre o la supermujer que amonesta: "Vos porque no tenés hijos".
Una descalificación que te deja afuera de cualquier discusión y que se
basa en la creencia chunga de que para ser un ser humano completo hay
que dejar descendencia bípeda.
Ya está, ya le dieron al mundo un vástago: cumplieron. Y desde esa
maternal/paternal superioridad te quieren hacer sentir un obtuso.
Nadie los preparó para asumir la tarea en la que pierden sus mejores
años: en general les sale mal, les tiran sus traumas a los chicos, los
hacen competir carreras personales, no los tienen en cuenta, los
muestran como toros campeones en una exposición y, horror, los padres
que son músicos, les escriben a sus hijos canciones horribles que
después todos tenemos que escuchar por la radio.
Y se convierten en personas mezquinas y poco solidarias: tienen que
pensar en su familia, en sus hijos. Hacerlo "por los hijos" justifica
cualquier agachada: "No puedo hacer paro, tengo hijos". "Te tuve que
deschavar, tengo hijos".
"No, yo no puedo, tengo hijos". ¿Y yo qué culpa tengo? ¿Por qué
trasladan la responsabilidad a todo el grupo? ¿Quién te obligó a
convertirte en padre, a no ser tu propia falta de objetivos mejores?
No se consideran completos sino tienen hijos, pero después los tienen
y no saben para qué.
No saben educarlos ni prepararlos para casi nada.
No saben ganarse su respeto y, muchas veces, ni siquiera su cariño.
Paren de tener hijos por dos años. Van a ver que se pone bueno. Te lo
digo yo, que no tengo hijos.
Sencillamente perfecto!!!
ResponderBorrarSaludos amigazo!
Si, hay mucha irresponsabilidad en el mundo. La superpoblación y la incógnita sobre el futuro de los próximos debería estar más presente en nuestras decisiones.
ResponderBorrarNo sé si puedo hacer un comentario relevante al respecto; no tengo hijos.
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